Celia de la Fuente Martín / ICM-ART
Yo
conocí a Alphonse Mucha en el instituto y desde entonces me enamore de su
hermoso arte. Por este motivo, cuando hace 2 años hubo una exposición sobre él
en Madrid en el Palacio de Gaviria, fui a ver varias de sus pinturas, carteles,
obras decorativas, joyas y bocetos, y conocer así un poco más a uno de mis
artistas preferidos.
Para
que conozcáis un poco más sobre este artista os voy a contar un poco sobre él.
Alphonse Mucha era un artista checo considerado como el inventor del Art Nouveau,
y fue uno de los máximos exponentes del modernismo europeo. Mucha empezó
haciendo ilustraciones para revistas parisinas, y es donde se empieza a ver lo
característico de su arte, el cual se centraría sobre todo en la sensualidad,
combinando colores y formas llenas de armonía e influenciada por los ideales de
la mujer romántica, lo que provoca que sus obras estén cargadas de simbolismo.
Algunas
de sus obras más importantes fueron: Gismonda (1894), Sarah Bernhardt (1896),
las Cuatro Estaciones (1896), La Princesse Lointaine (1896), Zodiac (1896),
Dance (1898), Autorretrato (1899), etc.
El
cartel de teatro que hizo para la actriz Sarah Bernhardt (1896), una de las
actrices más populares de la época, hizo que Mucha se convirtiera en un icono
publicitario.
Pero
Mucha no solo utilizo su arte en publicidad, decoración, carteles, billetes,
sellos y bellas artes, sino que también hizo joyas, cartas patentes y cálices
ceremoniales. Este artista quiso difundir con su arte las tres virtudes
fundamentales en la evolución del ser humano: la belleza, la verdad y el amor.
Autor: Alphonse Mucha, Summer (1896)
No hay comentarios:
Publicar un comentario